El mundo está inmerso en un periodo de máxima incertidumbre. Vivimos un momento de plena crisis en el que todo puede pasar. La llegada de Trump al poder ha sido un catalizador de cambios geopolíticos significativos con una administración que ha alterado los equilibrios geopolíticos y ha impulsado un proceso de cambio hacia un mundo multipolar. Este cambio ha roto los viejos equilibrios en  una sociedad global de libre mercado. Trump ha llegado decidido a sepultar a la Organización Mundial de Comercio (OMC).

Pero esta crisis viene de antes. La anticipamos con la crisis de las subprime en 2008, la pandemia de la COVID-19 y la guerra de Ucrania.  Trump no es el único causante de la  incertidumbre global. Las empresas europeas, en particular, han sentido el impacto de esta nueva situación y ahora se enfrentan a nuevos desafíos, como los aranceles impuestos por Estados Unidos, Europa, Canadá y China y a los vaivenes de decisiones que sacuden los mercados.

Impacto en las Empresas Europeas

Las empresas europeas, que ya venían enfrentando un mundo de incertidumbre constante, ahora se enfrentan a un escenario aún más incierto. Las cargas impuestas por Estados Unidos, Europa, Canadá y China son un ejemplo de los nuevos desafíos que deben resolver. Estos aranceles probablemente pondrán contra las cuerdas a las economías globales.

En esta coyuntura, es crucial que las empresas europeas fortalezcan su capacidad de anticipar riesgos y sean resilientes. Prepararse para enfrentar una crisis es aún más importante si quieres convertirte en una empresa HARD.  Es decir, que cuentes con visión anticipatoria y sistemas de alerta y reacción rápidos; que encajes rápido el golpe y te enfoques en la recuperación y que entiendas el contexto digital de hipervulnerabilidad.

Anticipación del riesgo y oportunidades

En un mundo tan incierto, la improvisación es un error, por más que a los españoles se nos de bien. Las empresas deben fortalecer su capacidad de anticipar riesgos y ser resilientes si quieren ser una empresa HARD. La anticipación de riesgos es crucial para la supervivencia y el éxito de las empresas en un entorno tan convulso. Las compañías deben trabajar, por lo tanto, en la identificación de riesgos y la preparación interna para mitigarlos y encontrar oportunidades de desarrollo y negocio. Porque, efectivamente, en situaciones tan convulsas como la actual también van a surgir oportunidades para aquellos que sepan leer las señales.

Visión Estratégica y Geopolítica

Las empresas HARD deben tener una visión estratégica y anticipatoria de los riesgos, con un enfoque en las debilidades del sistema. En un mundo tan incierto, es crucial que las empresas tengan una visión clara de los riesgos geopolíticos y económicos. Esta visión estratégica y anticipatoria puede ayudar a las empresas a mitigar los riesgos y encontrar oportunidades de desarrollo y negocio. Pensemos por ejemplo en como la guerra arancelaria puede propiciar una recisión, favorecer una estanflación, empobrecer a la población y tensar las cadenas de suministros, lo que puede derivar en graves tensiones sociales. No anticipar este escenario, Trump mediante, es fiarlo todo a la magia de la reactividad y la improvisación. No te va a salir bien si la crisis que se vislumbra en el horizonte es grave.

Ética y Sostenibilidad

En este contexto, es crucial que las empresas HARD mantengan criterios de sostenibilidad y ética. No tener claro el propósito o abandonar criterios de sostenibilidad (como están haciendo muchas en masa con BlackRock a la cabeza) puede llevar a una pérdida de reputación y desconfianza en el seno de tu cadena de valor. Actuar de esta forma tiene muchas posibilidades de salir mal a medio plazo. Las empresas deberían, en mi opinión, enfocarse en la sostenibilidad y la ética para mantener la confianza de sus stakeholders y mejorar su competitividad. Sé que no va a ser fácil y más viendo noticias como la actividad regulatoria en EE.UU. Los republicanos acaban de proponer la ley Protect USA que propone prohibir a las entidades que sean parte integrante de los intereses nacionales de los Estados Unidos participar en cualquier normativa extranjera de diligencia debida en materia de sostenibilidad, incluida la CSDDD o CS3D de la Unión Europea.

Alegan que «Las empresas estadounidenses deben regirse por las leyes de Estados Unidos, no por legisladores que no rinden cuentas en capitales extranjeras». Las implicaciones pueden ser serias para empresas y mercados. Tomar decisiones en este contexto basadas en valores va a ser complicado. Anticipar riesgos, insisto, es vital.

Conclusión

En resumen, la anticipación de riesgos en un mundo en plena crisis es la única forma de incrementar las posibilidades de supervivencia de las empresas en un escenario tan convulso. Además, es la mejor forma de encontrar oportunidades en medio de la crisis. Las empresas deben fortalecer su capacidad de anticipar riesgos, implementar un modelo de anticipación y escucha, tener una visión estratégica y geopolítica, y mantener criterios de sostenibilidad y ética. Solo así podrán sobrevivir y prosperar en un mundo tan incierto. Sólo así dejarás de ser una empresa WEAK.